Cuando no te defines por lo que piensas, por las creencias, por los pensamientos de separación, se abre en ti una nueva dimensión mas allá del pensamiento compulsivo y la idea de un yo separado .
Cuando perdonas las inconsciencia que percibes, y permites que el perdón te lleve , la necesidad de atacar o defenderse se disuelve.
Cuando comienzas a ser consciente de la conciencia en ti, dejaras de temer. Y al dejar de temer sabrás que tu real identidad no era esa colección de pensamientos de separación llamado ego . Ya no los atacas ni los defiendes; solamente los perdonas.
Al perdonar la ilusión o aquello transitorio con lo que antes te definías comenzarás a darte cuenta que cuando no atacas o defiendes lo transitorio, eso deja de ser amenazante para ti.
Hoy: Uso la Conciencia para observar, indagar, perdonar y darme cuenta.
Hoy : un gracias, gracias, gracias a la Conciencia que me habita.